Bandas extranjeras vienen al país a clonar tarjetas (Argentina)
Clarin.com.ar - Roban datos en cajeros de Recoleta y Barrio Norte
En las listas de detenidos hay ciudadanos con pasaportes búlgaros, rusos, ucranianos, venezolanos y colombianos. Todos ladrones que vienen de afuera, con tecnología que en la Argentina no se ve seguido. En los últimos meses se convirtieron en la gran preocupación de los bancos, porque sacan información de los cajeros automáticos sin que los clientes se enteren y, una vez fuera del país, ya sin riesgos, copian tarjetas y vacían las cuentas. Operan, sobre todo, en Barrio Norte y Recoleta, áreas de alto poder adquisitivo y presencia de turistas.
El Jueves Santo, mientras varios agentes de la comisaría 17ª reforzaban un operativo en La Bombonera, esta seccional recibió una llamada que alertaba de un robo a un Banco Francés en avenida Alvear y Parera. Allí fueron detenidos dos búlgaros. Los sorprendieron con dispositivos para copiar datos de las tarjetas de débito y microcámaras para detectar las claves que los clientes ingresaban al cajero automático. Habían entrado un mes antes por Ezeiza y pensaban irse una semana después.
"La mayoría son expertos en delitos informáticos de Europa del Este. Se han hecho muy fuertes en España y están empezando a venir aquí", confirmó a Clarín una alta fuente en seguridad bancaria.
Algunos especialistas sostienen que las formas de operar de estos ladrones ya son conocidas en el Primer Mundo, por lo que ahora prueban suerte en Brasil, Chile, Uruguay y la Argentina. Otros aseguran que, a pesar de que en países como Alemania, Inglaterra, Francia, Inglaterra o Estados Unidos las cuentas son en euros o dólares y los botines son más grandes, eligen venir acá porque la pena por estafa es más leve. Las bandas colombianas y venezolanas, en tanto, debieron "globalizarse" porque en sus países las tienen a raya.
A diferencia de otros ladrones de cajeros, los nuevos no tienen contacto con sus víctimas. No buscan sacarle el código por medio de un engaño ni le traban la tarjeta para luego usarla. Apuestan a la tecnología. Una pareja de venezolanos detenidos en un banco de Callao y Santa Fe habían instalado un cajero completo encima del verdadero. Tomaba la tarjeta, sacaba toda su información y guardaba también los códigos de acceso. En cambio, un ucraniano detenido el año pasado había colocado un copiador de tarjetas en la ranura de la máquina. Y encima del teclado original había puesto una réplica que servía para grabar la clave que el cliente ingresaba.
En los operativos que realizó la Policía Federal también se encontraron lectores "abrepuertas" falsos y cámaras conectadas a pendrives en los techos o en paneles laterales.
Como -a diferencia de los que secuestran tarjetas- no trabajan contra reloj, seleccionan las cuentas que más dinero les pueden rendir: de treinta denuncias del segundo semestre del año pasado, seis eran de turistas y las otras de tarjetas internacionales de ciudadanos argentinos. A uno de ellos le apareció en el resumen de cuenta una extracción hecha en un banco de Italia.
"Esta técnica de duplicación se la denomina skimming y es más difícil de controlar que la de los pescadores (los mecanismos que se usan para retener las tarjetas). Ahora el cliente se entera del robo uno o dos meses después, cuando le llega el resumen de la tarjeta. Es más difícil prevenir porque los dispositivos son imperceptibles. La única manera es tener un control casi diario del estado de cada cajero", señaló el jefe de Fraudes Bancarios de la Federal, Luis Dilagosto.
En rigor, estos ladrones sólo son detectados cuando, al manipular la máquina, activan la alarma interna. "No podemos trasladarle al cliente la responsabilidad de la prevención. Los sensores de los bancos y los monitoreos debemos hacerlos nosotros. Y en paralelo, están las investigaciones policiales que buscan atrapar a los ladrones antes de que se vayan del país", señaló un experto de una red de cajeros.
Por último, los investigadores explican que los casos conocidos hasta ahora son "la punta de lanza" de grupos que vienen a testear si pueden vulnerar la seguridad. "Frenar la primera oleada es desalentar a que sigan viniendo. Por eso es tan importante agarrarlos ahora", explicó uno de ellos.
Las herramientas que utilizan (fotos)
Consejos para el cliente
Si ve algo extraño en el cajero, no opere con su tarjeta. Los dispositivos están colocados cerca del teclado, en la parte de arriba del cajero o en el techo. Si el abrepuertas es más grande de lo normal, fíjese que la tarjeta corra normalmente. Ante cualquiera de estas irregularidades, llame a los números de seguridad del propio banco o al 911.
Dentro de las posibilidades, se debe extraer el dinero de un cajero que sea conocido por el cliente. Así, si hay algo no habitual, es más fácil reconocerlo.
En general, los estafadores colocan sus dispositivos cuando el banco está cerrado, porque no se encuentran los empleados encargados de la reposición y el mantenimiento. Por eso, se recomienda hacer las extracciones en horarios de atención al público. Ante cualquier problema, hay personal de consulta.
Autor: Alejandro Marinelli
Fuente: Clarin.com.ar
Clarin: Detienen a dos búlgaros que clonaban tarjetas en cajeros
Segu-info: Notas anteriores sobre cajeros
En las listas de detenidos hay ciudadanos con pasaportes búlgaros, rusos, ucranianos, venezolanos y colombianos. Todos ladrones que vienen de afuera, con tecnología que en la Argentina no se ve seguido. En los últimos meses se convirtieron en la gran preocupación de los bancos, porque sacan información de los cajeros automáticos sin que los clientes se enteren y, una vez fuera del país, ya sin riesgos, copian tarjetas y vacían las cuentas. Operan, sobre todo, en Barrio Norte y Recoleta, áreas de alto poder adquisitivo y presencia de turistas.
El Jueves Santo, mientras varios agentes de la comisaría 17ª reforzaban un operativo en La Bombonera, esta seccional recibió una llamada que alertaba de un robo a un Banco Francés en avenida Alvear y Parera. Allí fueron detenidos dos búlgaros. Los sorprendieron con dispositivos para copiar datos de las tarjetas de débito y microcámaras para detectar las claves que los clientes ingresaban al cajero automático. Habían entrado un mes antes por Ezeiza y pensaban irse una semana después.
"La mayoría son expertos en delitos informáticos de Europa del Este. Se han hecho muy fuertes en España y están empezando a venir aquí", confirmó a Clarín una alta fuente en seguridad bancaria.
Algunos especialistas sostienen que las formas de operar de estos ladrones ya son conocidas en el Primer Mundo, por lo que ahora prueban suerte en Brasil, Chile, Uruguay y la Argentina. Otros aseguran que, a pesar de que en países como Alemania, Inglaterra, Francia, Inglaterra o Estados Unidos las cuentas son en euros o dólares y los botines son más grandes, eligen venir acá porque la pena por estafa es más leve. Las bandas colombianas y venezolanas, en tanto, debieron "globalizarse" porque en sus países las tienen a raya.
A diferencia de otros ladrones de cajeros, los nuevos no tienen contacto con sus víctimas. No buscan sacarle el código por medio de un engaño ni le traban la tarjeta para luego usarla. Apuestan a la tecnología. Una pareja de venezolanos detenidos en un banco de Callao y Santa Fe habían instalado un cajero completo encima del verdadero. Tomaba la tarjeta, sacaba toda su información y guardaba también los códigos de acceso. En cambio, un ucraniano detenido el año pasado había colocado un copiador de tarjetas en la ranura de la máquina. Y encima del teclado original había puesto una réplica que servía para grabar la clave que el cliente ingresaba.
En los operativos que realizó la Policía Federal también se encontraron lectores "abrepuertas" falsos y cámaras conectadas a pendrives en los techos o en paneles laterales.
Como -a diferencia de los que secuestran tarjetas- no trabajan contra reloj, seleccionan las cuentas que más dinero les pueden rendir: de treinta denuncias del segundo semestre del año pasado, seis eran de turistas y las otras de tarjetas internacionales de ciudadanos argentinos. A uno de ellos le apareció en el resumen de cuenta una extracción hecha en un banco de Italia.
"Esta técnica de duplicación se la denomina skimming y es más difícil de controlar que la de los pescadores (los mecanismos que se usan para retener las tarjetas). Ahora el cliente se entera del robo uno o dos meses después, cuando le llega el resumen de la tarjeta. Es más difícil prevenir porque los dispositivos son imperceptibles. La única manera es tener un control casi diario del estado de cada cajero", señaló el jefe de Fraudes Bancarios de la Federal, Luis Dilagosto.
En rigor, estos ladrones sólo son detectados cuando, al manipular la máquina, activan la alarma interna. "No podemos trasladarle al cliente la responsabilidad de la prevención. Los sensores de los bancos y los monitoreos debemos hacerlos nosotros. Y en paralelo, están las investigaciones policiales que buscan atrapar a los ladrones antes de que se vayan del país", señaló un experto de una red de cajeros.
Por último, los investigadores explican que los casos conocidos hasta ahora son "la punta de lanza" de grupos que vienen a testear si pueden vulnerar la seguridad. "Frenar la primera oleada es desalentar a que sigan viniendo. Por eso es tan importante agarrarlos ahora", explicó uno de ellos.
Las herramientas que utilizan (fotos)
Consejos para el cliente
Si ve algo extraño en el cajero, no opere con su tarjeta. Los dispositivos están colocados cerca del teclado, en la parte de arriba del cajero o en el techo. Si el abrepuertas es más grande de lo normal, fíjese que la tarjeta corra normalmente. Ante cualquiera de estas irregularidades, llame a los números de seguridad del propio banco o al 911.
Dentro de las posibilidades, se debe extraer el dinero de un cajero que sea conocido por el cliente. Así, si hay algo no habitual, es más fácil reconocerlo.
En general, los estafadores colocan sus dispositivos cuando el banco está cerrado, porque no se encuentran los empleados encargados de la reposición y el mantenimiento. Por eso, se recomienda hacer las extracciones en horarios de atención al público. Ante cualquier problema, hay personal de consulta.
Autor: Alejandro Marinelli
Fuente: Clarin.com.ar
Clarin: Detienen a dos búlgaros que clonaban tarjetas en cajeros
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