20 oct 2016

El pseudodebate por el voto electrónico en Argentina

Como en casi todos los fenómenos complejos la explicación es necesariamente compleja, para el horror de quienes sostienen que las únicas explicaciones válidas son las simples y piensan que ser filósofo es conocer un buen número de frases hechas, proverbios y aforismos o están convencidos que son suficientes 140 caracteres para expresar ideas profundas.

En este caso, quizás la razón principal, entre tantas otras también importantes, se encuentre la increíble dedicación que requiere el desarrollo de una nueva carrera de Abogacía que sea moderna y pertinente a la par de seguir intentando hacer ciencia jurídica referida a la sociedad de la información en un ambiente en el que el conservadurismo y la protección de intereses creados hace que a los innovadores, buenos o no, seamos perseguidos (aun inventando y sosteniendo causas judiciales).

El motivo que me lleva a buscar la continuidad a este blog es el pseudo debate que se está llevando a cabo por la reforma electoral en general y el llamado voto electrónico en particular, tema que espero tratar esta única vez para luego retomar la vieja costumbre de comentar cuestiones casi diariamente.
Se puede argumentar que el debate no es tal sino aparente porque se han formado facciones cuyo objetivo es ganar la discusión, por los motivos que sean, más allá de la veracidad o validez de sus argumentos. Están los que presentan el voto electrónico como la panacea y la solución a todos los problemas conocidos del sistema de votación actual y están los que se han embarcado en una cruzada que niega en forma absoluta la posibilidad de que se use esa tecnología para el ejercicio de voto, convirtiéndolo casi en una cuestión de fe.
El problema que esta cuestión suscita es que siendo el voto el método mediante el cual el pueblo elige a sus representantes, la adopción de posturas tanto mágicas como talibanescas permiten vislumbrar que el resultado va a ser uno que todos, no importa el bando que hayan elegido o no hayamos elegido, vamos a lamentar.

Desde la postura mágica la actividad se enfoca más en lo institucional. Siendo que algunos de quienes sostienen esta visión creen que la ley de reforma electoral, tal como fue presentada, es el medio para llevarlo a cabo, el esfuerzo se concentra en los acuerdos políticos que logren la sanción del proyecto de ley. Todo hace pensar que, obviando las muchas críticas y problemas que la redacción del proyecto de ley tiene, siguiendo con actitudes muy cuestionables para convencer a todos que con la tecnología se terminan los problemas del sistema electoral argentina y en parte por la autoexclusión del debate del grupo que convirtió su oposición en una cruzada, este grupo está logrando que la ley sea sancionada.

Los que han decidido que el voto electrónico "es peor ataque al sistema democrático desde 1983" han convertido su idea en una cruzada, y como en toda cruzada, la fe empieza a tomar el lugar de los argumentos sólidos y razonables, y las tergiversaciones y las falacias de todo tipo van ganándole a los hechos, lo que implica una radicalización creciente de quienes sostiene esta postura y una situación en la que los que deciden, naturalmente, cada vez los tienen menos en cuenta. Esto es particularmente lamentable porque es justamente en ese grupo donde se encuentran muchos de los que más podrían aportar a un debate serio, que hoy no existe.

Contenido completo en fuente original ElectroMate, por Dr Fernando Jose Barrio

Suscríbete a nuestro Boletín

6 comentarios:

  1. Muy buen articulo el del Dr Fernando Barrio, pero el principal demonio es el desconocimiento. Aquí, quizás la principal culpa la tiene el gobierno actual. Porque no emitió capsulas informativas sobre el sistema en cuestión. Es decir, alejar las dudas sobre el chequeo universal del voto, el anonimato del mismo, el envio electronico y la seguridad en la y de la base de datos centralizada. ¿Alguien sabe fehacientemante donde encontrar algo de esto para informarse mejor? Gracias!

    ResponderBorrar
  2. La única verdad es la realidad dijo Aristoteles, y ella indica que el sistema actual es fraudulento por las conocidas prácticas del voto "cadena" que obviamente no se practica en una escuela privada de Recoleta sino en los profundos rincones del conurbano y provincias. Si los que se oponen a cualquier cambio son las caritas conocidas del FPV o cualquier sigla de ese partido que nos viene robando el futuro hace más de 60 años significa que esta ley va en el camino correcto. Después discutamos las maneras de asegurar la plataforma tecnologica o el codigo de las máquinas, pero no pongamos el carro delante del caballo. Amen

    ResponderBorrar
  3. Creo que si, es necesario un debate mas amplio, pero en estos días, creo que no es necesario cambiar el sistema. No tiene sentido, si no hay una infraestructura adecuada para el voto, solo servirá para gastar mucho en tecnología. En Argentina creo que se necesita mucho tiempo para que la mayoría de la gente admita este tipo de tecnología para tan nuestro como la "ceremonia" de ese Domingo. Por ahora le estarían sacando el derecho de ser propia las elecciones (votos, controles, escrutinios, etc...). Creo que si desean gastar en tecnología hay otras cosas mucho más necesarias como la salud y educación entre otras.

    ResponderBorrar
  4. ¿Será cierto todo lo que se dice en el siguiente artículo ? ...

    "Vot no": https://elgatoylacaja.com.ar/vot-no/

    ¿Qué opinan ustedes? ...

    ResponderBorrar
  5. Sugiero , pongamos el debate a la inversa: Supongamos que estamos insatisfechos con nuestro sistema actual, el del voto electrónico, y nuestros gobrnantes nos ofrecen como salvación el sistema que tenemos actualmente...
    Cual sería nuestra reacción?

    ResponderBorrar
  6. El sistema de voto electrónico utilizado en CABA en 2015 tenía memoria. Y esto estaba prohibido por la reglamentación. ¿Alguien reparó en eso?.

    ResponderBorrar

Gracias por dejar un comentario en Segu-Info.

Gracias por comentar!